En la actualidad, los niveles de inseguridad cada vez son mayores, el secuestro en México es uno de los negocios más lucrativos para los delincuentes y estos cada vez cuentan con mayor recursos para comprar armas y tecnología, superando la capacidad que tiene las autoridades para hacerles frente, sin perder de vista la corrupción, que juega un papel fundamental ya que las mismas autoridades permiten, participan y protegen al delincuente; por tal motivo, algunos empresarios se preocupan por contar con un equipo de seguridad para sí y su familia, así como algunas empresas buscan también contar con seguridad para sus ejecutivos.
Tomando en cuenta lo anterior, la seguridad en nuestro país, deja ser un trabajo meramente para puro desempleado o gente inexperta, sino que ahora es ya una profesión, donde se puede hacer una carrera y desarrollarse. Por tal motivo, la gente que se interesa en la protección ejecutiva, además de las habilidades y conocimientos que pueden llegar a adquirir, debe tener muy claro, que para que pueda desarrollarse en el área, no solo bastan las ganas, sino verdadera vocación ya que la seguridad no es un simple trabajo, sino una forma de vida.
Algunos empresarios y empresas que cuentan actualmente con personal de seguridad solo buscan que” alguien” esté detrás de ellos “cuidándolo”, sin preocuparse tanto por el desarrollo físico, emocional, mental y profesional de dicha persona, el cual deberá ser capaz de tomar decisiones al momento de una crisis, evaluar situaciones y saber actuar de la mejor manera frente a ellas sin que sufra daño su protegido. O peor aún, hay empresarios que consideran innecesario contar con personal de seguridad ya que “no pasa nada” y lo consideran un “gasto” inútil.
Analizando los riesgos
El primer paso para determinar si un ejecutivo requiere o no de medidas de seguridad para su protección es conocer si por la naturaleza de su función, por la actividad a la que se dedica la empresa, por la situación de inseguridad de la región o por una amenaza actual y directa es necesario considerar la protección para sus ejecutivos, midiendo el impacto y sus consecuencias en la organización si algo les llegara a suceder al ejecutivo.
Debemos analizar el entorno en el que se encuentra la organización, la inestabilidad social, política, económica en la que se encuentra, la criminalidad de la zona, los índices delictivos para crear un catálogo de posibles riesgos, medir su probabilidad e impacto y plantearse medidas de seguridad para mitigar esos riesgos; por lo que se sugiere seguir los siguientes pasos:
- Llevar a cabo un análisis de riesgo en la organización
- Elaborar un catálogo de riesgos
- Determinar si los ejecutivos están expuestos a algún riesgo (secuestro, extorsión, asalto, etc.)
- Diseñar e implementar medidas adecuadas para cada riesgo
- Elaborar políticas corporativas de seguridad
Perfil del ejecutivo a proteger
Debemos de tomar en consideración una vez que se determine que es necesaria la protección personal es considerar el tipo de ejecutivo a proteger, cuál es su posición dentro de la organización y cuáles son sus actividad y responsabilidades que por la naturaleza de su trabajo pudiera incrementar su riesgo; cuál es el perfil del ejecutivo, su nivel socioeconómico, si es una persona pública o es de bajo perfil, el entorno que acostumbra, los miembros de su familia, a qué miembro de la familia se les va a asignar personal de seguridad o si el ejecutivo se encuentra bajo una amenaza actual y hay necesidad de protegerlo; Todos estos factores se deberán tomar en cuenta al momento de diseñar un plan de protección ya que no es lo mismo cuidar al dueño de la compañía que al director general.
Partiendo de la premisa que la seguridad ejecutiva esta estereotipada, la mayoría de los ejecutivos no le gusta contar con seguridad a su alrededor, normalmente se percibe como una intromisión incomoda en la vida personal y familiar de quien se va a proteger y un gasto innecesario para la mayoría de las organizaciones y si aunado a esto se le asigna personal poco profesional y preparada, el rechazo será aún mayor por parte del mismo ejecutivo e inclusive de los
miembros de su familia, por lo que debemos diseñar e implementar medidas que no trastoquen en lo posible la vida cotidiana del ejecutivo, su familia y su entorno, optimizando los recursos asignados y contra con procesos de reclutamiento, selección y capacitación muy bien diseñados para formar un buen equipo de seguridad que vaya de acuerdo a quien se va a proteger, de lo que hablaremos más adelante.
Seguridad “personal” vs seguridad “institucional”
Por la naturaleza de la seguridad ejecutiva se crea un vínculo entre los agentes y la persona a quien se protege, debido a su cercanía y se vuelven “parte de su vida”, por lo que es muy frecuente ver que los mismos ejecutivos se involucren en las decisiones del día a día en cuanto a su propia seguridad, desde la hora de llegada del equipo de seguridad a su casa, las consignas (mandados) durante su jornada de trabajo, inclusive el ejecutivo toma la decisión de cuando deben o no deben de seguirlo a cierto lugar, que agentes quieren o no quieren en su equipo, si dejan el vehículo blindado estacionado en su cochera, entre otras muchas indicaciones; este nivel de involucramiento dependerá en gran medida de las políticas corporativas de seguridad establecidas y tratar en la medida de lo posible que el ejecutivo no tome estas decisiones sino el responsable de la seguridad en la organización quien tome las decisiones de la seguridad. Debemos lograr que el ejecutivo acepte y cumpla con las medidas de seguridad recomendadas y no quede a su criterio el llevarlas a cabo o no y esto se logrará en parte por la habilidad del responsable de la seguridad de la empresa en desarrollar lineamientos de seguridad para los ejecutivos que se les asigne seguridad personal; esto es más complicado cuando a quien protegemos es el dueño de la compañía o al accionista mayoritario a diferencia de un ejecutivo de la compañía que debe de seguir normalmente las políticas corporativas de seguridad establecidas.
Es importante que dentro de la empresa exista un responsable de ver todas las cuestiones de seguridad en la empresa, claro que esto dependerá del tamaño de la organización o negocio, pero debe de haber alguien responsable de la seguridad.
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